Año 1623. El príncipe de Gales y el duque de Buckingham viajan a Madrid para pedir la mano de la infanta María Ana, hermana del Rey Felipe IV. Para evitar el enlace, fray Emilio Bocanera, presidente del tribunal de la Inquisición, y Luis de Alquézar, secretario real de los Austrias, les encargan al capitán Alatriste y a Gualterio Malatesta interceptar la llegada de los dos ingleses.
Tras haber desafiado la voluntad de la Inquisición Española salvándole la vida al Príncipe de Gales, tildado de hereje por no ser afín a la religión católica, Diego Alatriste se encuentra cara a cara con el terrible Bocanegra.
El príncipe de Gales quiere salir de la corte y sumergirse en las bulliciosas calles de la ciudad por lo que el conde de Guadalmedina le confía su protección al capitán Alatriste.
Madame de Brissac y el cardenal Richelieu planean arruinar los planes de boda entre el príncipe de Gales y la hermana de Felipe IV. Luis de Alquézar organiza una fiesta de máscaras en palacio.
El padre Ferrán se reencuentra con Diego Alatriste, quién intentará convencerlo para que cambie su testimonio y así salvar a Inés de Castro de la hoguera.
El conde-duque de Olivares planea casar en secreto al heredero del trono británico con la infanta María Ana de Austria y así evitar una guerra entre Inglaterra y España.
Tras fracasar en su cometido durante el intento de boda entre Carlos y María Ana, el conde de Guadalmedina pone precio a la cabeza de Alatriste. Este le pide ayuda a María, provocando los celos de La Lebrijana.
El conde de Guadalmedina le encarga a su amigo Alatriste una importante misión: hacerse cargo de la seguridad de un poderoso banquero alemán que acaba de llegar a Madrid junto con su mujer y su dama de compañía.
Una de las meninas de la infanta María Ana de Austria fallece trágicamente. Todas las sospechas apuntan a Íñigo Balboa, por lo que piensa en desaparecer una temporada de Madrid y marchar a su pueblo natal.
Enterado de que Bocangera está detrás del cardenal que negociaba las capitulaciones de la boda real, el Conde Duque de Olivares le ha relegado del encargo. El Inquisidor ha demostrado que está dispuesto a todo por evitar la alianza con el Príncipe hereje de Inglaterra.
María Ana de Austria y Carlos Estuardo esperan casarse en breve pero antes deben hacer frente a la férrea oposición de fray Emilio Bocanegra, las dudas de Felipe IV y las oscuras maniobras del cardenal Richelieu.
Tras un acuerdo previo, parece que la boda entre la Infanta María Ana y el Príncipe Carlos no se celebrará. La gente muere en las calles víctimas de la peste y los enfermos se amontonan en la iglesia del Dómine.
Alatriste se enfrenta con Malatesta. La relación del Rey con María de Castro tiene a todos muy preocupados en Palacio. Bocanegra ordena matar a la actriz. Inglaterra declara la guerra a España
