Año 2008. Malena, de 22, lleva una rutina solitaria en una ciudad lejana a su hogar, cuando una noticia la conecta con un pasado traumático. En 2004, fue a un recital de rock en el local República de Cromañón. Allí se desató un incendio y murieron 194 jóvenes. La noticia la confronta con la culpa que siente por haber sobrevivido y la impulsa a tomar una decisión que cambiará su vida.
En 2008, Malena se enfrenta a la difícil decisión de presentarse como testigo en el juicio por Cromañón y se reencuentra con un objeto importante que había perdido en el recital. El shock emotivo la lleva a los días previos al incendio. En 2004, audiciona como guitarrista de Los Peces Chinos —la banda de sus amigos del barrio— y, además, debe convivir con la culpa por un beso prohibido.
Malena tiene un encuentro emotivo y perturbador, y se anima abrir su vieja mochila. Los objetos que ve la conectan con el primero de los tres conciertos de Callejeros, donde se reaviva la tensión sexual en torno a un amor prohibido. Aparte, Bichito conoce a Javier y empiezan a vislumbrarse los primeros indicios de peligro en Cromañón.
En 2008, Malena reconecta con Villa Celina y sus calles, y se topa con un mural que la lleva a recordar las horas previas a la segunda fecha de Callejeros. En 2004, Nico y Lucas se pelean, Luli recibe una noticia impensada y Bichito vive un momento incómodo con Javier. De regreso al presente, un viejo amigo le da a Malena un dato revelador sobre Nico.
Todos pasan sus últimas horas de felicidad antes del concierto del 30 de diciembre de 2004. Ya en Cromañón, se desata el incendio que mata a 194 jóvenes y destruye a una generación entera de pibes que disfrutaban del rock. Además, segundos antes de que empiece el horror una revelación hace que el triángulo entre Nico, Malena y Lucas se vuelva especialmente perturbador.
Las madres y los padres de los chicos reciben la noticia del incendio y se abocan desesperadamente a encontrar a sus hijos. En las horas y los días siguientes, los sobrevivientes deben enfrentar la muerte de amigos y parientes. Malena escapa abrumada a la ciudad de Rosario y Carlos Binder empieza a construirse como referente judicial dentro de la causa Cromañón.