“La creencia en algún tipo de maldad sobrenatural no es necesaria. Los hombres por sí solos ya son capaces de cualquier maldad”. Joseph Conrad. Hoy vamos a hablar de una de las parejas más sádicas y pervertidas que ha conocido la humanidad. Un caso que conmocionó a Inglaterra y al mundo, y que nos hace preguntarnos, una vez más, hasta dónde es capaz de llegar la crueldad del ser humano. Hoy vamos a hablar de Fred y Rosemary West. Una pareja que torturó, violó y mató a 12 jóvenes, algunas de ellas siendo aún niñas e incluso sus propias hijas, en Gloucester, una pequeña localidad de unos 100.000 habitantes al Oeste de Inglaterra, en la segunda mitad del siglo XX. Las víctimas fueron enterradas en la propiedad donde vivía el matrimonio.
Phillip Craig Garrido nació en Pittsburg, California, el 5 de Abril de 1951. Desde muy joven tuvo problemas con el abuso de drogas y llegó a ser arrestado por posesión. Ya en el año 1972 fue arrestado por drogar y violar a una niña de 14 años, pero los cargos fueron retirados al negarse a declarar la víctima. En 1976 fue acusado de secuestrar y violar a una mujer, Catherine Callaway. Garrido la llevó a un almacén de Reno, Nevada, y allí la tuvo retenida durante más de cinco horas. Fue arrestado al ser descubierto por un policía, que se acercó a la puerta del almacén al verla sin cerrar y escuchó entonces los gritos de auxilio de Callaway.
Desde 2007 hasta 2013, una familia rusa de clase media del pequeño pueblo de Divnoye de poco más de 14.000 habitantes, en Stavropol, al suroeste de Rusia, asesinó a más de treinta personas para conseguir dinero y por pura diversión. La madre, algunas fuentes dicen que enfermera y otras que profesora de guardería, de 46 años, y el padre, dentista de 35, junto con sus dos hijas, una de ellas menor de edad, disfrutaban torturando y matando sádicamente a sus víctimas, algunos casos niños, y a pesar de ello, ellos mismos y el entorno que les rodeaba, se veían y les veían como una familia “normal”.
San Bernardino es una localidad de unos 200.000 habitantes, al este de Los Angeles, California. A las 10:59 horas de la mañana del 2 de Diciembre de 2015, sin ningún tipo de explicación, el matrimonio formado por Syed Farook de 28 años de edad y Tafsheen Malik de 27, ambos de origen pakistaní, asesinaron a tiros a 14 personas e hiriendo a otras 21 mientras estaban en una reunión navideña entre compañeros de trabajo. El hombre había estado unos minutos antes compartiendo la celebración con sus compañeros de trabajo, hasta que decidió abandonar el lugar sin decir nada para después volver con su mujer y perpetrar la masacre.
La oficina del sheriff del condado de Dekalb, en Fort Payne, Alabama, recibió una llamada telefónica la noche del 29 de septiembre de 1982. Una voz de mujer, sin distorsionar, preguntó: "¿Están buscando a Lisa Ann Millican fugada del Centro Harpst? Para después informar con todo detalle que el cadáver de Lisa, de 13 años de edad, se encontraba en Little River Canyon de Fort Payne, un enorme barranco del estado de Alabama. Esa misma noche, varios agentes de la ley se desplazaron al lugar indicado, en plena naturaleza agreste, y con la ayuda de linternas, localizaron el cadáver. El cuerpo de Lisa Millican yacía sobre un árbol caído. La habían disparado en la cabeza.
30 de Noviembre de 1957. Un joven de 19 años para a repostar en una gasolinera al norte de la ciudad de Lincoln, Nebraska. Cuando va a pagar se encapricha de un peluche y decide comprárselo a su novia. Al sacar la cartera y comprobar el dinero que llevaba se da cuenta de que no tiene suficiente, y le propone al dependiente, también joven, de 21 años, que se lo dé y luego él volvería después a pagárselo. El dependiente se niega y el joven se marcha de la gasolinera muy enfadado. A las 3 de la madrugada del 1 de Diciembre de 1957, el mismo joven regresa a la gasolinera y compra un paquete de cigarrillos. Vuelve al coche, enciende su aparato de radio y conduce unos minutos, pensativo, soñando con hacer algo distinto en su vida .... hasta que decide volver a la estación de servicio.
El 24 de junio de 1979, las amigas Brenda Lynne Judd de 14 años de edad, y Sandra Colley de 13, pasaban el día disfrutando de la feria que se celebraba en Reno, en el condado de Washoe, Nevada. Una pareja se les acercó para entablar conversación con ellas. Después de unos minutos, la pareja les ofreció a las niñas la posibilidad de conseguir algo de dinero repartiendo publicidad sobre los coches aparcados de las personas que estaban visitando la feria. Las niñas aceptaron. Los cuatro se acercaron hasta un lugar apartado, donde la pareja tenía aparcada su furgoneta, con la supuesta intención de coger la publicidad para después repartirla en los parabrisas de los vehículos. Cuando estaban al lado del vehículo, el hombre sacó una pistola y amenazándolas las obligó subir a la parte trasera de la furgoneta.
Hoy vamos a hablar de una de las parejas más aterradoras de la historia británica y del mundo entero. Él sentía fascinación por Adolf Hitler y la ideología nazi. Le impresionaba el poder de la oratoria del dictador, y le veía algo así como un padre espiritual. Una de sus aficiones era reunirse en el salón de su casa con su pareja y leerle en voz alta el Mein Kampf, el libro pseudo autobiográfico de Hitler en el que postuló sus ideales políticos. Ella, rápidamente tomó como suyas las ideas sociales y políticas de su enamorado, y pasó de ser una devota religiosa y amante de los animales, a una asesina y torturadora de niños, sin importarle en absoluto el daño que pudieran provocar sus actos. Hoy vamos a hablar de Ian Brady y Myra Hindley, los “asesinos de los páramos”
Finales de 1945. Recién terminada la Segunda Guerra Mundial. Un hombre de 31 años, elegante y apuesto, decide volver a su país natal, Estados Unidos, después de haber vivido durante los 13 años anteriores en España, concretamente en Granada, donde se casó con su esposa, Encarnación, y acababan de tener su primer hijo. La idea era conseguir un trabajo en América para después poder traer a su familia y vivir con él. Compra un billete en un carguero con destino a la isla de Curasao. Durante el trayecto, un día, mientras subía la escalera que daba a cubierta sufrió un fortuito y grave percance. La tapa de acero de una escotilla se soltó, con la mala fortuna de ir a golpearle en la cabeza.
Navidad de 1990. Port Credit, un barrio al sur de la ciudad de Mississauga, en Ontario, Canadá. La familia Homolka, padres y las tres hijas, junto con el novio de la hija mayor, se disponen a realizar la cena navideña en familia. La hija mayor, de 20 años de edad, tiene una idea que le lleva rondando varios días por la mente. Se siente frustrada por que su novio, 6 años mayor que ella, le reprocha una y otra vez que no fuera virgen cuando él la conoció, y ella siente, cada vez más, una creciente necesidad de complacerle e intentar hacerle feliz en sus deseos. Ella sabe de la fijación que su pareja tiene sobre su hermana pequeña, Tammy, de 15 años de edad. Sabe que siente una obsesiva atracción por ella. Le ha sorprendido en varios ocasiones mientras la espía cuando ella entra al baño. Antes de terminar la cena, toma la decisión de hacerle un regalo a su novio, por Navidad. Dado que ella no podía cambiar su pasado, decidió regalarle la virginidad de su hermana.
Enero del año 2.000. Un joven carismático y atractivo, de 30 años de edad, convence a la novia de su hermano, de 26 y 28 años respectivamente, para dar un paseo en coche. Después de pasar por la iglesia mormona, a la que pertenecían anteriormente ambos, se dirigieron a la Bahía de San Francisco. Estacionaron el coche y contemplando la bella panorámica él le confesó algo a ella. Le contó que era el profeta elegido para derrotar a Satanás y hacerse después cargo de la Iglesia Mormona. Asesinando si fuera necesario. También le confesó que Dios, a quien él llamada El Espíritu, le hablaba.
Hemos llegado al final de la temporada. Al final del recorrido por las vidas de estas parejas que, parapetados detrás de su relación, cometieron los crímenes más atroces. Torturaron, secuestraron, mataron, violaron.... Y todo en nombre del más alto de los sentimientos: el amor. Resulta sorprendente como han existido, y existen, personas que son capaces de someter a otro ser humano a la más depravada violencia, y paralelamente sentirse entregados al sentimiento amoroso hacia otra persona. Parece como si lo más alto y los más bajo del ser humano, convergieran en cada uno de estos asesinos. Hoy vamos a hablar del perfil psicopático de estas parejas. Vamos a hablar de la Anatomía del psicópata.
Una tarde cualquiera del año 1939, el sheriff adjunto del condado de Dallas, Texas de 35 años, Ted Hinton, estando sólo en su despacho, decidió encender el mueble radio modelo Zenith Z-1000 Stratosphere que tenía en un rincón de la habitación. Escuchando, en silencio, rememoró lo ocurrido 5 años atrás, cuando él mismo participó como protagonista en el final de toda una leyenda... Cuando, sin buscarlo, se convirtió en parte de la Historia.
Yo os declaro marido y mujer.... Parece que algunas personas no entendieron bien eso de “hasta que la muerte nos separe”. Bienvenidos a la segunda temporada de Amores que Matan, una serie podcast de Podimo sobre parejas asesinas. Amores que Matan.
El 10 de marzo de 1989, Mark Kilroy, Bradley Moore, Brent Martin y Bill Huddleston se dirigían desde Austin hacia la costa sur del estado, a la Isla del Padre Sur, en Texas, para pasar las vacaciones del Spring Break, un tiempo de descanso que otorgan las universidades americanas al llegar la primavera y que los adolescentes suelen usar para realizar todo tiempo de transgresiones lúdicas. Se registraron en el hotel Sheraton pasada la media noche.
Los Angeles, California. Eran pasadas las doce la noche del 3 de agosto de 1980. Se encontraba sola, apoyada en la barra del bar de música country “El pequeño Nashville”, tomándose una copa, y pensando. Ese bar había sido como su segunda casa. Jack Murray tardaba en subir al escenario a tocar una de esas horribles canciones que ponían la banda sonora al medio oeste americano. Resultaba increíble cómo ese trasnochado músico, aún tenía esperanzas de triunfar.
20 de marzo de 1999. Albuquerque, Nuevo México. Eran pasadas las 10 de la noche y Cinthya Vigil Jaramillo se prostituía, como de costumbre, paseando por las calles de la ciudad. De pronto, un coche se paró a unos metros de ella. El conductor hizo sonar el claxon para llamar su atención y que se acercara al vehículo. Cinthy caminó hasta el coche. El conductor bajó la ventanilla y ambos se pusieron a hablar con la intención de negociar sus servicios. Pronto llegaron a un acuerdo. Cinthya se subió al coche. El conductor le dijo que era oficial de policía y la esposó, después arrancó el coche. Cinthya sabía que algo no iba bien y que esa no era la forma de actuar de la policía. Viajaron hasta Elephant Butte, una pequeña localidad de poco más de 1000 habitantes, en el mismo estado de Nuevo México.
12 de Enero de 1995. Tyson Park, un bosque cercano a la Universidad de Tennessee, próximo a la ciudad de Knoxville. Estaba anocheciendo. Cuatro adolescentes, un chico y una chica afroamericanos y dos chicas caucásicas, una de ellas pelirroja, caminaban entre los árboles. De pronto, la cabecilla del grupo, la pelirroja, empezó a increpar a una de las otras dos chicas. El adolescente y la joven pelirroja eran novios, y esta, presa de los celos, acusaba a la otra joven, de nombre Colleen Slemmer, de 19 años de edad, de querer seducir a su pareja.
Madrugada del 21 de Septiembre de 2013. Una noche clara en la Galicia profunda. Una zona rural, solitaria, llena de robles, pinos y eucaliptos. Dos personas pasean por una pista forestal en las inmediaciones de la Aldea de Cacheiras, una pequeña población de más de 5.000 habitaciones perteneciente al municipio de Teo, en La Coruña. Sobre la 1:30, los dos vecinos descubren el cuerpo sin vida de una niña de 12 años, de rasgos asiáticos. Alarmados, vuelven deprisa a la aldea para llamar a la Guardia Civil. Cuando regresan donde se encontraba el cadáver, relataron a las autoridades que lo vieron con diferente postura. Los padres de la pequeña, residentes en Santiago de Compostela, habían denunciado su desaparición bien entrada la tarde, casi ya noche, del día anterior.
Madrugada del 4 de marzo de 1995. Nueva Orleans. Una pareja de jóvenes de color se introducen en el Ford Torino rojo destartalado de ella. Ella tiene 24 años, él sólo 18. Arrancan el motor y conducen por las calles de la ciudad que nunca duerme. Del bolsillo de la chaqueta de la mujer cuelgan unas llaves de un llavero con un signo vietnamita. Llegan hasta las puertas del restaurante vietnamita Kim Anh propiedad de la familia Vu. La mujer lo conocía bien. Habían estado ya allí esa misma noche cenando gratuitamente pues eventualmente trabajaba en el negocio como guardia de seguridad supliendo a Ronaldd Williams, vigilante habitual del local, de 25 años de edad y con un hijo nacido tan sólo diez días antes. Ambos, Ronnie y su compañera, también son agentes de policía de la ciudad de Nueva Orleans.
3 de Junio de 1985. 15:05 horas. Summerfield, Carolina del Norte. Una Suv Chevrolet Blazer huye de la policía a toda velocidad con cuatro ocupantes a bordo. Uno de los pasajeros comienza a disparar su subfusil UZI a los coches patrulla y se produce un fuego cruzado. Al llegar a la intersección entre la US 220 y la NC 150 el vehículo gira hacia el este, hasta llegar a Bronco Lane, donde los agentes pueden ver que se enciendan bruscamente las luces de freno. Los coches patrulla se detienen a una distancia prudencial para evitar que les alcancen las balas, aunque no lo consiguen.