Un divorcio, insulina y una herencia multimillonaria. Parecen ingredientes sacados de una película de sobremesa de la tele. Pero la historia que nos ocupa es tan real como su ilustre protagonista, y está, como veremos ahora, lejos de terminar. El Caso Mainat estalló el uno de octubre de dos mil veinte, cuando se hizo público que Ángela Dobrowolski, de treinta y siete años, había sido acusada de tratar presuntamente de asesinar a su marido, el multimillonario productor Josep María Mainat, inyectándole insulina mientras dormía. Los hechos ocurrieron en la madrugada del veintidós al veintitrés de junio, y cada día que pasa aparecen detalles más inverosímiles.
El Caso Mainat parece visto para sentencia. Según el relato que prevalece a día de hoy, está claro que Angela Dobrowolski trató de asesinar a su marido inyectándole insulina, y que tarde o temprano terminará en la cárcel por ello. ¿No? Por desgracia para los investigadores, y para disfrute de los programas del corazón, lo que al principio parecía un caso más o menos simple, con su asesino, su víctima y su móvil, cada día se complica más. Los hechos que parecían probados se ponen en duda, aparecen actores secundarios que parecen sacados directamente de películas de serie B, y las demandas cruzadas se empiezan a amontonar.
Hay pocos casos que den más trabajo a policía y a jueces como el Caso Mainat. En cuestión de unos pocos meses se han producido incontables denuncias cruzadas entre la pareja. Además del caso principal, las acusaciones de intento de asesinato que pesan sobre Ángela Dobrowolski, existen procesos abiertos de índole muy variada: por robo, coacciones, allanamiento de morada, vulneración de orden de alejamiento, malos tratos, agresiones… la lista crece cada día.
Las grandes historias nunca son lo que parecen. Es cierto que el Caso Mainat es tan enrevesado que es difícil sacar conclusiones claras, pero tan solo hace falta darse una vuelta por los medios de comunicación para percatarse de una cosa: casi todos dan por hecho que Ángela es culpable. Pero en la historia oficial, defendida por los Mossos y por el entorno de Josep María Mainat, hay grietas enormes. Tanto, que hacen que vaya a ser muy complicado demostrar a ciencia cierta que Ángela trató de asesinar a su marido. Antes de recapitular todas las contradicciones de la versión de los Mossos, es necesario recordar que Mainat es uno de los grandes nombres de la televisión en España. El productor es un personaje muy influyente en el panorama nacional, y quizás eso explique por qué la inmensa mayoría de los medios dieron por buena su versión de los hechos.
Rosario Porto y Alfonso Basterra completaron su felicidad con la adopción de la bebé china Asunta Yong Fang. Pero sus vidas se fueron al traste con la aparición del cadáver de Asunta doce años más tarde, un asesinato del que fueron acusados y por el que fueron condenados a 18 años de prisión. En este primer episodio, reconstruimos el último día en la vida de Asunta.
Rosario y Alfonso denuncian la desaparición de Asunta, pero su comportamiento despierta sospechas entre los agentes. La reacción de ambos, sobretodo de Rosario, llama la atención de los agentes por su incredulidad y frialdad ante las palabras de los guardias.
Los padres adoptivos de Asunta Basterra son detenidos, y la grabación de sus conversaciones en los calabozos marca el rumbo de la investigación. Los agentes se apresuraron, había que grabar las conversaciones entre Alfonso y Rosario. Presentaron una arriesgada petición ante el juez solicitando un mandamiento para la sonorización de los calabozos, todo lo que hablaran Rosario y Alfonso iba a ser grabado.
Con el hallazgo del ordenador portátil de Alfonso Basterra, se encuentran documentos comprometedores para la pareja. La instrucción del caso continúa, los padres de Asunta son condenados... pero quedan aún muchas incógnitas por resolver.
Hay personas que, sin saberlo, han cambiado la manera de pensar de toda una sociedad. Ocurrió con Galileo cuando afirmó que la tierra giraba alrededor del sol y fue tachado de hereje. Ocurrió con la activista afroamericana Rosa Parks al negarse a ceder el asiento a un blanco y sucedió con Nevenka Fernandez, quien por entonces ocupaba el cargo de concejal de Hacienda en el Ayuntamiento de Ponferrada y cuya valentía sirvió para dar un gran paso en la lucha feminista.
Ismael Álvarez se convirtió en el primer político condenado por acoso sexual en España pero, a pesar de ganar la batalla judicial, Nevenka Fernández perdió la social y se vio obligada a rehacer su vida fuera del país. Él, ya condenado, siguió paseándose triunfante por Ponferrada. La sociedad respaldó los comportamientos misóginos del alcalde pero la valentía de Nevenka sirvió para que otras mujeres comenzaran a denunciar su situación. Lo que van a escuchar es el caso de Nevenka Fernández, la pionera del ‘Me too’
Gracias a su nuevo trabajo y al apoyo de su pareja, Nevenka logró olvidarse de aquellos años en el ayuntamiento de Ponferrada llenos de abusos y amenazas. Condenado, Ismael Álvarez se mantuvo alejado de la política mientras su víctima rehacía su vida lejos de España. Todo estuvo en aparente normalidad hasta 2011 cuando las viejas heridas volvieron a reabrirse. Tras la sentencia, Álvarez presentó su dimisión como alcalde. Pero 9 años después, el primer político condenado por acoso sexual, volvía libremente a la polític
El 14 de junio de 1981 no fue un domingo cualquiera del verano del 81. Era 14 de junio y Amparo Cuevas no sabía que a partir de ese momento su vida iba a dar un giro de 180 grados. Los hechos sucedieron en Prado Nuevo, en la localidad madrileña de El Escorial. Amparo, frente a una fuente y rodeada de fresnos vio a alguien, afirmó tener una visión, una aparición mariana: era la Virgen de los Dolores. Esta vez se dirigió directamente a ella para trasladarle un mensaje: “Quiero que se construya en este lugar una capilla, que se venga a meditar de cualquier parte del mundo la pasión de mi hijo. Si hacen lo que yo digo, el agua de esta fuente curará”. Para Amparo las palabras de aquella figura celestial fueron claras. Esta es la historia de 'LOS VIRGINIANOS'.
Sin buscarlo Amparo Cuevas creó una legión de fervientes seguidores con sus visiones de la Virgen. Este fue el comienzo del movimiento pero no de los sucesos paranormales que tuvo la supuesta vidente. Retrocedemos un año atrás, hacia 1980, fue ahí cuando Amparo comenzó a revelar acontecimientos sobrenaturales. Esta es la historia de 'LOS VIRGINIANOS'.
La ola de seguidores que se formó a alrededor de Amparo Cuevas llamó la atención de muchos y puso a la supuesta vidente en el punto de mira. Los críticos al movimiento decidieron obligarla a negar las apariciones de la Virgen. Lo hicieron con violencia, Amparo Cuevas estuvo a punto de ser asesinada. Los hechos sucedieron una mañana de mayo de 1983, dos años después de las apariciones de Prado Nuevo.
Amparo Cuevas y Miguel Martinez lograron solucionar todos los problemas con la Iglesia. Las supuestas donaciones al clero para las obras de la Catedral de la Almudena funcionaron. A partir de entonces Amparo decidió desaparecer del orden público, los rumores sobre una posible enfermedad fueron en aumento.
¿Cómo gestionó Amparo Cuevas las visiones y las apariciones de la Virgen? ¿Era verdad que la veía o se trataba de un engaño? ¿Estaba Amparo Cuevas sana mental y psicológicamente? Son las preguntas que se hicieron en su momento detractores y ateos del pueblo de El Escorial. Cómo una asistenta que apenas sabía leer y escribir embaucó a cientos de seguidores para rezar en Prado Nuevo.
José Bretón nació en Córdoba en 1973. Cuando cumplió dieciocho años se matriculó en derecho, pero pocos meses después cambió de idea y se alistó en el ejército. Entre abril y octubre de 1994 estuvo destinado en Bosnia-Herzegovina. Después de la traumática experiencia, su contrato con el ejército expiró y volvió a Córdoba. Tuvo una relación sentimental que no acabó bien: tras la ruptura, trató de suicidarse tomando una gran cantidad de somníferos que le había recetado su psiquiatra, poco antes de conocer a Ruth, la que sería su mujer y madre de sus hijos. Se casaron en 2002. El resto es parte de la historia negra de España.
Desde hace ya varios años, el imaginario colectivo asocia el nombre de José Bretón con crímenes inhumanos. Su simple mención nos evoca a lo peor que las personas pueden tener dentro, al monstruo detrás de la máscara. Alguien por quien es imposible sentir compasión. Pero esto no siempre fue así. Tras la desaparición de Ruth y José, y por un periodo de casi un año, el caso estuvo completamente bloqueado. Muchas voces clamaban contra el padre que se negaba a revelar el paradero de sus hijos, pero otras tantas veían a un padre en proceso de divorcio injustamente encarcelado. Había indicios de todo, pero ninguna prueba concluyente.
Hace ya casi una década que el jurado dio el veredicto de uno de los casos criminales más sobrecogedores de la historia reciente de España. El proceso duró más de lo previsto por culpa de un error pericial, pero, casi desde el primer momento, tanto familiares, amigos, testigos y psicólogos coincidieron en algo: José Bretón no era una persona normal. Se han escrito ríos de tinta sobre la personalidad de José Bretón, la mayoría en busca de la respuesta a una simple pregunta: ¿Qué clase de persona haría algo así? A nadie le gusta pensar que existen individuos capaces de actos tan horribles viviendo entre nosotros, en sociedad. Necesitamos que alguien nos diga que no, que sus acciones responden a una psicopatía evidente, o a una enfermedad mental.
Gabriel tenía solo ocho años el día que comenzó la pesadilla, el veintisiete de febrero de dos mil dieciocho. Desde el primer momento, los investigadores se percataron de que estaban ante un caso potencialmente complejo. En pleno invierno, en la localidad de Las Hortichuelas residen habitualmente no más de una docena de personas, y no había ni testigos ni cámaras de seguridad que pudieran arrojar algo de luz al asunto. Además, la pobre cobertura móvil hacía muy difícil poder triangular los teléfonos presentes en la zona a la hora del suceso.
Doce días. Doce interminables días duró la agónica espera para los padres de Gabriel. El desenlace fue el peor posible: El once de marzo de dos mil dieciocho, la Guardia Civil arrestó a Ana Julia Quezada mientras sacaba el cuerpo del pequeño del maletero de su coche. La escena fue tan terrible que varios de los agentes encargados de la detención no pudieron evitar echarse a llorar. Ella defendió a gritos su inocencia. Tan solo un día después, la autopsia reveló que el niño murió por estrangulamiento el mismo día de su desaparición.
Han pasado ya más de tres años desde que sucedió, pero el crimen de Gabriel es de esos que no se olvidan. Uno de esos pocos sucesos que calan tan hondo en la sociedad que nunca se deja realmente de hablar de ellos, a pesar de que el juicio a la asesina terminó hace ya dos largos años. Pero, aunque el jurado consideró probado que Ana Julia Quezada acabó con la vida de Gabriel Cruz, y que después ocultó su cuerpo durante casi dos semanas para tratar de escapar de la justicia, la gente continuó haciéndose la misma pregunta: ¿Cómo puede alguien cometer un acto tan sádico y cruel solo por celos? ¿Qué clase de persona sería capaz de hacer algo así?
El mes de junio de 1956 cambió la vida de Ana Orantes para siempre. En aquellos inicios de verano, cuando el buen tiempo empezaba a hacer de Granada una ciudad espléndida para disfrutar, Ana Orantes quedó con una amiga para acudir a la fiesta del Corpus Christi. Iba a ser un día de celebración y de diversión, pero jamás se imaginó lo que iba a cambiar su destino en aquella fecha. En esa fiesta Ana Orantes conoció a un chico. Se llamaba José Parejo y salieron juntos a bailar aquella noche, en cierto modo porque Ana quería darle celos a un novio que había tenido recientemente y con el que a partir de aquel día ya nunca pudo cruzar una palabra más. Fue una bonita noche, de diversión, de celebración y de dar rienda suelta al carácter alegre y sociable que tenía Ana, pero lo que parecía el inicio de una bonita historia se fue tornando rápidamente en una pesadilla y en un infierno de 40 años que tan solo una mujer fuerte como ella podía aguantar.
Para Ana Orantes su matrimonio fue como vivir en la peor cárcel del mundo. Jamás se había imaginado que el día en el que le dio el sí quiero a José Parejo su vida cambiaría de manera tan drástica. Sin apenas darse cuenta, su vida había pasado a convertirse en una tortura diaria. José Parejo sometió durante 40 eternos años a su mujer. Obsesionado con el orden y con el silencio, siempre encontraba una excusa para dar rienda suelta a su odio y justificar así los maltratos hacia Ana Orantes. Un vaso puesto boca abajo, una silla ligeramente desplazada de su sitio... cualquier coartada era buena para soltar una bofetada o propinar una paliza desproporcionada.
Después de muchos años y tras algún intento fallido, a Ana Orantes le concedieron por fin el divorcio en el año 1996. Era una pequeña victoria, una batalla ganada, un soplo de aire fresco después de un matrimonio en continua guerra que duró 4 interminables décadas. Pero ni siquiera esa victoria fue total para Ana. Tan sólo un triunfo parcial dadas las particularidades que tuvo aquella sentencia de divorcio. El juez de paz, efectivamente, aceptó que marido y mujer pudieran separar su vínculo, pero ese dictamen aún guardaba una gran parte negativa. El magistrado dictó que Ana Orantes y José Parejo, pese a quedar divorciados a efectos legales, deberían vivir en la misma vivienda.
El caso de la Guardia Urbana de Barcelona es una trama de celos y tormentosas relaciones amorosas entre cuatro personas que desembocaron en el asesinato de Pedro Rodríguez. Un crimen cometido por Rosa Peral y Albert López, lleno de contradicciones en las declaraciones de los implicados y con un final terrible para el asesinado, víctima de una trama que organizaron su pareja y su amante para terminar con su vida.
Dos días después de abandonar y quemar el cadáver en el pantano de Foix, la Policía encontró el cuerpo. Pero tras su primer interrogatorio, Rosa Peral decidió cambiar de versión. Pasó de tratar de incriminar a su exmarido en el asesinato de Pedro Rodríguez, a señalar directamente como el principal sospechoso a su amante, Albert López, la persona con la que precisamente había orquestado todo el plan de asesinato.
Albert López también decidió cambiar su versión de los hechos al ser detenido. Y, para sorpresa de todos, a quien apuntó como la principal culpable del crimen fue a su amante Rosa Peral, de quien dijo que le obligó además a participar en el plan. Rosa y Albert fueron condenados a 25 y 20 años de prisión respectivamente aunque sus abogados ya han anunciado que recurrirán al Tribunal Constitucional
En la vida real, los finales que no se dan, son heridas que no llegan a cerrarse. El macabro relato sobre el asesinato de Helena Jubany comenzó poco antes de que alguien cercano a ella decidiera acabar por su vida. Un relato que sigue sin tener un final 20 años después. Helena nació en Barcelona, natural de Mataró. Se graduó el periodismo y era amante de la literatura. En el año 2000 decidió mudarse a Sabadell, en la mejor época de su vida, donde comenzó su peor pesadilla... Sigue al show en la App para no perder cada mes un nuevo Caso Criminal. Un podcast exclusivo de Podimo producido por EVA Tecnison.
Desde que a Helena Jubany se le perdió la pista la mañana del 30 de noviembre de 2001, hasta que un golpe seco despertó a los vecinos de la calle Calvet d'Estrella 48 de Sabadell, pasaron dos días. Para su familia, transcurrieron con aparente normalidad. Para ella, probablemente fue un infierno difícil de imaginar. Helena vivía sola y era una mujer muy independiente, por lo que su desaparición no llamó la atención de inmediato. No fue hasta que empezó a faltar a algunos compromisos que tenía con amigos y familiares que su círculo cercano comenzó a hacerse preguntas. Sigue al show en la App para no perder cada mes un nuevo Caso Criminal. Un podcast exclusivo de Podimo producido por EVA Tecnison.
Montse Careta era una chica normal. Apasionada de la literatura y los relatos, y profesora de profesión y de vocación, era de carácter introvertido. Según cuentan sus allegados, tenía fuertes complejos sobre su aspecto físico. Que ellos supieran, nunca había tenido pareja. Hasta que llegó Santi. Se conocieron en una salida de la Unión Excursionista de Sabadell, y Montse se enamoró perdidamente de él. La mujer sintió una conexión como nunca antes. Santi era guapo, cariñoso, atento, generoso, cálido… Los adjetivos se le desbordaban. Veían la vida de forma similar, tenían los mismos sueños, los mismos valores, estaban enamorados. Al menos, Montse lo estaba. Sigue al show en la App para no perder cada mes un nuevo Caso Criminal. Un podcast exclusivo de Podimo producido por EVA Tecnison.
Han pasado más de 20 años desde que los vecinos de Calvet d'Estrella 48 de Sabadell encontraron el cuerpo sin vida de Helena Jubany. Dos décadas de luto, de lucha, de injusticia, de dolor. Y de silencio. No fue un asesinato especialmente bien planeado. Desde el primer momento se descartó la tesis de suicidio, los sospechosos no tenían coartadas sólidas y dejaron atrás pistas evidentes que los implicaban. Y, sin embargo, los autores siguen libres. Sólo dos personas pisaron alguna vez la cárcel. Contra una de ellas no había más que pruebas circunstanciales, y la otra se suicidó clamando por su inocencia. Y ese suicidio lo cambió todo. Sigue al show en la App para no perder cada mes un nuevo Caso Criminal. Un podcast exclusivo de Podimo producido por EVA Tecnison.
Esther López nació el 28 de mayo de 1986. tenía treinta y cinco años cuando alguien le arrebató la vida la madrugada del trece de enero de 2022, aunque el suceso que conmocionó la pequeña población de Traspinedo se fraguo el día anterior. A las siete y media de la tarde del doce de enero, Esther López se preparaba para salir. Había quedado con unos amigos para ver la final de la Supercopa de España en el bar James Dean de Traspinedo. Poco después, uno de sus colegas, Luis, pasó por su casa, y juntos se encaminaron hacia el pub. Sigue al show en la App para no perder cada mes un nuevo Caso Criminal. Un podcast exclusivo de Podimo producido por EVA Tecnison.
A día de hoy, nadie sabe con certeza quién mató a Esther López la madrugada del trece de enero de 2022. Existen indicios, teorías y líneas de investigación, pero la verdad, como el asesino, sigue ahí fuera. Lo único que la policía tiene claro es que la muerte de la vecina de Traspinedo no fue accidental. Alguien la mató. Sigue al show en la App para no perder cada mes un nuevo Caso Criminal. Un podcast exclusivo de Podimo producido por EVA Tecnison.
Las gentes van y vienen. Preguntan, maldicen, y asienten. Caminan hacia la plaza Mayor mes a mes con el corazón roto. ¿Quién contará a nuestros hijos que alguien asesinó la amistad y el amor, cegando el reflejo de la alegría para siempre? Este es uno de los trece poemas que el pueblo de Traspinedo leyó en memoria de su vecina, Esther López, el 12 de febrero de 2023. Justo cuando se cumplía el primer aniversario de su asesinato. Sigue al show en la App para no perder cada mes un nuevo Caso Criminal. Un podcast exclusivo de Podimo producido por EVA Tecnison.
En las redes todas las fronteras se difuminan y eso llevó a Daniel Sancho de 29 años a entablar una relación con Edwin Arrieta de 44 a espaldas de su novia Laura con la que planeaba casarse. La aventura poco a poco se convirtió en una cárcel para Sancho hasta punto que para conseguir escapar terminaría con la vida del médico colombiano. El asesinato, con descuartizamiento del cuerpo incluido, sucedió el 2 de agosto de 2023, una fechoría confesada por el propio cocinero español en sus declaraciones ante la policía. Sigue al show en la App para no perder cada mes un nuevo Caso Criminal. Un podcast exclusivo de Podimo producido por EVA Tecnison.
El presunto asesinato y descuartizamiento de Edwin Arrieta por parte de Daniel Sancho no fue algo improvisado a ojos de la policía. A pesar de sus meticulosos esfuerzos por deshacerse del cadaver envolviéndolo en diferentes bolsas y arrojándolo al mar además de a un vertedero para la policía dar con Sancho no fue difícil. El cocinero español cometió un par de fallos que pusieron rápidamente a las autoridades bajo su pista. Sigue al show en la App para no perder cada mes un nuevo Caso Criminal. Un podcast exclusivo de Podimo producido por EVA Tecnison.
Daniel Sancho se enfrenta en Tailandia al mayor de los castigos, la pena de muerte, por haber presuntamente asesinado y descuartizado hasta en 17 partes a Edwin Arrieta. Sin embargo, hay algunos resquicios por los que el cocinero podría eludir la ejecución y en su lugar cumplir cadena perpetua. Incluso su defensa tiene algún as en la manga con el que podría reducir notablemente el grado de su condena. Sigue al show en la App para no perder cada mes un nuevo Caso Criminal. Un podcast exclusivo de Podimo producido por EVA Tecnison.
Este crimen, descrito por la Fiscalía en su momento como uno de los más espeluznantes, horribles y terribles que se han cometido en España, conmocionó a la pequeña localidad de Pioz, en Guadalajara. Patrick, con apenas 19 años, decidió de forma premeditada acabar de un plumazo con la vida de sus tíos y sus primos el 16 de agosto de 2016 en el chalet en el que la familia de origen brasileño residía. El asesino degolló a sus familiares, descuartizó sus cuerpos y los metió en bolsas de basura mientras se hacía fotos con los cadáveres y narraba en directo el crimen a un amigo.
Patrick Nogueira decidió refugiarse en Brasil una vez que la Guardia Civil descubrió los cuerpos de sus tíos y sus primos descuartizados en el chalet de Pioz. Él había sido el autor de esa espeluznante masacre y era plenamente consciente de ello. De hecho, había hecho vida con normalidad durante todo un mes desde que degolló a sus familiares. Natural de Joao Pessoa, una ciudad del estado de Paraíba, Patrick pertenecía a una familia relativamente acomodada. De hecho, había disfrutado de muchos privilegios durante su infancia aunque ya escondía algunos oscuros capítulos en el pasado.
Después de la fuga de Patrick Noeguira a Brasil fue su propia familia la que adoptó un rol de suma importancia en la resolución del caso, especialmente su hermana, Hanna Nogueira. Abogada de profesión, su figura tuvo una relevancia capital para que el asesino confeso aceptara regresar a España para ser juzgado y para que asumiera la gravedad de los hechos que había cometido aquella tarde de agosto en el chalet de Pioz. Sigue al show en la App para no perder cada mes un nuevo Caso Criminal. Un podcast exclusivo de Podimo producido por EVA Tecnison.
Una mujer mentirosa, capaz de manipular a su esposo, a sus amigas, a sus compañeros de trabajo e incluso a sus amantes con mucha facilidad. Una persona que utilizaba el sexo como arma de manipulación, fría y poco empática con sus parejas y acostumbrada a mentir. Eso es lo que reza el perfil psicológico que se recogen en los informes que tiene la policía de María Jesús Moreno Cantó, más conocida como Maje. Esta alicantina conspiró con uno de sus amantes para asesinar a su marido mientras se veía a escondidas con más hombres. Sigue al show en la App para no perder cada mes un nuevo Caso Criminal. Un podcast exclusivo de Podimo producido por EVA Tecnison.
Una mujer mentirosa, capaz de manipular a su esposo, a sus amigas, a sus compañeros de trabajo e incluso a sus amantes con mucha facilidad. Una persona que utilizaba el sexo como arma de manipulación, fría y poco empática con sus parejas y acostumbrada a mentir. Eso es lo que reza el perfil psicológico que se recogen en los informes que tiene la policía de María Jesús Moreno Cantó, más conocida como Maje. Esta alicantina conspiró con uno de sus amantes para asesinar a su marido mientras se veía a escondidas con más hombres. Sigue al show en la App para no perder cada mes un nuevo Caso Criminal. Un podcast exclusivo de Podimo producido por EVA Tecnison.
Una mujer mentirosa, capaz de manipular a su esposo, a sus amigas, a sus compañeros de trabajo e incluso a sus amantes con mucha facilidad. Una persona que utilizaba el sexo como arma de manipulación, fría y poco empática con sus parejas y acostumbrada a mentir. Eso es lo que reza el perfil psicológico que se recogen en los informes que tiene la policía de María Jesús Moreno Cantó, más conocida como Maje. Esta alicantina conspiró con uno de sus amantes para asesinar a su marido mientras se veía a escondidas con más hombres. Sigue al show en la App para no perder cada mes un nuevo Caso Criminal. Un podcast exclusivo de Podimo producido por EVA Tecnison.