Marcelo Tinelli llega a Punta del Este para disfrutar las vacaciones con su familia luego de mucho tiempo separados. Sus hijas, Cande, Mica y Juana, lo esperan con sus parejas mientras descansan y planean el año laboral. Sin embargo, Marcelo les tiene preparada una sorpresa: la presentación de Milett, su nueva novia. Con pocas horas de convivencia, los primeros conflictos saltan por los aires.
El conflicto entre Milett y Mimi sacude la paz familiar horas antes de una de las fiestas más icónicas de Punta. Un Marcelo muy obsesivo se pone a cargo de la organización del evento y no piensa suspenderlo a pesar de la pelea. Mientras Tirri busca recomponer las relaciones, Cande enfrenta inesperadas adversidades en un concierto y comienza a sospechar la presencia de malas energías en la casa.
Mica, Cande y Juana aprovechan la partida de Marcelo, Milett y Tirri hacia Buenos Aires para vivir sin restricciones ni reglas en la mansión. Toman fuerza y deciden que van a echarle en cara a Marcelo todas las actitudes cotidianas de Milett que no les gustan. Igualmente, descuentan que la actriz peruana no va a regresar a Uruguay con el conductor, aunque pueden llevarse una sorpresa negativa.
Las vacaciones en Punta del Este van llegando a su fin y el festejo de cumpleaños de Tirri en un yate es una buena excusa para dejar atrás los malos momentos. A pesar de esto, luego de la charla con su padre, las Tinelli siguen observando a Milett con lupa. Marcelo recibe malas noticias respecto del regalo de casamiento de Cande justo antes de pasar la cena más incómoda de todas las vacaciones.
Marcelo organiza una escapada a Mendoza junto a su familia para hacer un seguimiento del regalo de boda de Cande. Las chicas lo sorprenden con una única condición que obliga a su padre a enfrentar un momento incómodo con Milett. El "boss" debe tomar una decisión difícil y le pide ayuda a Tirri. De regreso en Buenos Aires, las tensiones que parecían haber desaparecido recrudecen.
Marcelo se reencuentra con Soledad Aquino, su primera esposa y madre de Mica y Cande. El casamiento que se avecina los tiene a todos más unidos y conmovidos que nunca. Con las emociones a flor de piel, Marcelo encara la final de su show televisivo y la incertidumbre de lo que vendrá; pero un revés emocional inesperado con sus hijos lo hace repensar algunas decisiones.
La familia se va de viaje a Mendoza sin parejas. Sin embargo, todos intuyen que ese acuerdo tiene las horas contadas y se preparan para una sorpresa que finalmente llega. Marcelo aprovecha para avanzar con el regalo de casamiento de Cande, que cada vez presenta más obstáculos. Tirri decide abstenerse de participar en las disputas entre Marcelo y sus hijas y eso hace que todos se enojen con él.
El pacto de ‘no parejas´ finalmente se rompe cuando alguien más aterriza en Mendoza. La disputa silenciosa termina y toda la familia se relaja para disfrutar el último día del viaje. Una emotiva sorpresa de Marcelo deja a sus hijas y a Tirri con palpitaciones. Llega el día de la boda de Cande y Coti y toda la familia Tinelli vive el momento de mayor emoción.
