Fran y Eva prestan asistencia en una prueba de maratón popular. Un conductor que tiene una trifulca con otro a causa del atasco que provoca la carrera, pierde los nervios y atropella a uno de los corredores. El agresor iba a ver al juez para recuperar la custodia de sus hijos y el dramático suceso le va a traer problemas.
Una mujer ingresa con vómitos. La acompaña su cuidadora, una joven argentina, conocida de Héctor. La enferma muere y, entre sus pertenencias, la cuidadora descubre un dinero. Cuando se presenta la sobrina de la fallecida, la cuidadora duda si entregarle el dinero porque la mujer no se llevaba bien con nadie de su familia.
El hijo de Vilches, visiblemente recuperado, puede dejar de ir a terapia. Es el padre quien se niega a seguir yendo pese a no haber superado ciertos problemas personales.
Han desaparecido numerosos informes de la clínica que tantos problemas está dando al hospital con sus casos rebotados. Cristina contrastará los datos que tienen del centro.