Mario y Ana regresan al hospital después de haber pasado la noche juntos. En el camino, un coche derrapa delante de ellos y va a parar a un río. No hay tiempo para esperar a que lleguen los bomberos, por lo que Mario se lanza al agua y saca a una mujer del vehículo.
Ella le pide que saque a su bebé del coche. Mario encuentra la bolsa del niño, pero ni rastro de la criatura. Se llevan a la madre al hospital en estado de histeria. Cuando encuentran al padre descubren que el bebé murió hace un año y la madre no ha conseguido todavía superar las secuelas psicológicas.
Por otro lado, un hombre se desploma a unos cien metros del hospital. Andrea se encarga de atenderle en su primera operación tras serle intervenida la mano.