A Fran se le presenta una oportunidad para escapar de su penosa y azarosa vida, ya que se le ha ocurrido una idea innovadora para la próxima cena de minoristas de zapatos, los zapatos con luces. El protagonista aspira a resarcirse de todas las veces que ha hecho el ridículo en dicha reunión y está convencido del éxito de su brillante innovación. Para reforzar la presentación cuenta con Belén para que le sirva de modelo. Mientras Pelayo, Lola y Pati aguardan impacientes el resultado de la demostración para actuar según la reacción del público. Por otra parte, Kiko continúa con su inexistente vida amorosa, en la que sus ligues brillan por su ausencia, pero ante las chanzas de sus amigos maquina un plan en el que necesita a un maniquí del centro comercial.