Madrid 2013: María, oculta bajo su identidad de Mercedes Dantés, y con un arma en el bolsillo de su abrigo, sigue a su tío Enrique hasta una de sus clínicas. Está tan cerca de él que podría apretar el gatillo sin problema. Está obsesionada con vengarse de él, pero tiene que encontrar el momento más apropiado. Madrid 2001: Fernanda ha muerto y María quiere respuestas. No se quita de la cabeza que su tío Enrique está detrás de la muerte de su madre. Y más aún, cuando descubre que han incinerado el cuerpo de Fernanda bajo tutela de Enrique y que ya no es posible hacer ni la autopsia, ni la prueba de ADN. Para más inri, Trini desvela que Fernanda descubrió, en el último momento, la implicación de Enrique en la trama de los niños robados. Había que callarle la boca ylos vídeos de seguridad de la clínica registran a Enrique saliendo a la hora de la muerte. Todo encaja.