En marzo de 1981 desaparecieron 45 millones de pesos desde la sucursal de Chuquicamata del Banco Estado. Las primeras pistas apuntaron a responsabilizar al cajero Sergio Yáñez y al agente Guillermo Martínez. Sin embargo, la verdad era aún más terrible, ambos fueron secuestrados por agentes de la CNI que luego de utilizarlos para llevar a cabo el robo los dinamitaron en el desierto...¿Descubrirán a los verdaderos responsables?