Luego de asistir a una cita con Pablo y su hija, Sara recibe en su apartamento la visita de Magda, quien le hace una importante revelación sobre su vida personal. Magda le pide a Sara que no intervenga en su plan para conquistar a Pablo y admite que Analía en realidad no le genera tanta preocupación. Tal como lo planeó, Analía llega al restaurante favorito de Helena para interrumpir una reunión entre la niña, Carolina y Sofía Mejía. Helena se acerca a Analía para solicitarle que se aleje de la vida de su padre y le asegura que, aunque Carolina pudo rehacer su vida sentimental con Guillermo, Pablo la ha estado pasando muy mal.