Seguimos las huellas del Romanticismo en Andalucía, un movimiento cultural y político originado en Alemania y en el Reino Unido -a finales del siglo XVIII- como una reacción revolucionaria contra el racionalismo de la Ilustración y el Clasicismo. Este movimiento, cuya principal idea era conferir prioridad a los sentimientos, es el responsable de buena parte de nuestra imagen fuera de España. Los viajeros románticos que visitaron Andalucía en el siglo XIX sintieron una fascinación por nuestra tierra, que marcaría nuestra proyección exterior, y se extendería a la imagen de los españoles en general. En sus escritos y pinturas dibujaron una tierra exótica poblada por toreros, bailaoras flamencas y bandoleros, a la sombra de extraordinarios monumentos de antiguas culturas. A partir de entonces, esa imagen romántica y folclórica, quedaría grabada en todo el mundo como seña de identidad no sólo de Andalucía, sino de toda España.