Al darse cuenta que doña Graciela comienza a sentirse sola al ver a todas las parejas del barrio, Germán decide consolarla. Al ver el apoyo que él le brindaba, Graciela le comenta que su vida amorosa está mal desde que su pareja se fue del país por lo que Germán le sugiere que llame a su marido. ¿Será ese un buen consejo?