Tras la repentina muerte de Carlos Alberto, Pepa Carranza descubre que su marido tenía una aventura con una ex actriz porno, Julieta Laconcha, y que ha dejado a la familia en la ruina: deben 400.000€ al banco. Pero este desengaño amoroso y las deudas que amenazan su negocio familiar no es lo único a lo que tienen que enfrentarse: los De La Vega, la familia rival, unos “chungos de barrio” que ahora se las dan de gente rica y poderosa gracias a levantar un imperio, intentan aprovecharse de la situación. Por suerte, Pepa, cuenta con la ayuda de su sobrino Iván, que acaba de salir de la cárcel, para hacerles frente. Sin embargo, Iván tiene un punto débil: está enamorado de Rocío Burgos, una ambiciosa concejala y la prometida de Jacobo De La Vega, el primogénito de la familia De La Vega.
Pepa y los suyos ganaron la primera batalla, pero la guerra con los De La Vega no ha hecho más que comenzar. Mientras planean cómo saldar la deuda con el banco, Pepa encarga a Iván y Raúl que vendan la alianza de Carlos Alberto. Julieta aparece en un programa del corazón detallando su relación con el venezolano para desatar aún más la furia de Pepa. Mientras sigue planeando acabar con sus rivales cuanto antes, Doña Consuelo promete regalar a Rocío una gargantilla familiar… que no existe. Acompañada de Andrei, ambos acuden a la misma casa de empeños en la que Iván y Raúl han ido a vender la alianza de Pepa. Un fortuito encuentro que acaba con Doña Consuelo secuestrada y retenida en la academia. Durante la fiesta de compromiso de Jacobo y Rocío, la extraña ausencia de su madre pone muy nervioso a Esteban.
A pesar de que los Carranza han sido invitados a la inauguración de la estatua de Doña Consuelo, Pepa prohíbe a su familia cualquier contacto con los De La Vega. Lo que Pepa no sabe es que Javi está liado con Sara, ni que Iván sigue enamorado de Rocío Burgos, la concejala que está prometida con Jacobo. Por su parte, Jimmy acoge en su boutique a Julieta, que no tiene dónde caerse muerta. Sin embargo, la visita de Esteban al local le ofrecerá una oportunidad: Julieta tendrá que sacar sus mejores armas para seducirle. En la academia, Valeria se esconde para mandar mensajes y hablar por teléfono. Cuando ve a su mujer subir a un coche de lunas tintadas, Raúl da por hecho que le pone los cuernos. Valeria le explica que todo ha sido un malentendido. Iván y Raúl descubren que, tras su noche de borrachera, han robado la estatua de Doña Consuelo y que la policía la está buscando.
Los Carranza consiguen colocar la estatua en su sitio sin ser vistos, pero necesitan dinero con urgencia: tienen solo 15 días para pagar la deuda. Iván se entera de que los De La Vega reciben la visita de un empresario ruso al que van a regalar un Kandisky original. Tras comprobar que tienen una copia del mismo cuadro en la academia, convencerá a Javi para dar el cambiazo. Valeria sigue enfadada y Raúl cree que se están cumpliendo sus peores temores: es el fin de su matrimonio. Resignado, hace sus maletas para abandonar su casa cuando Pepa le hace ver que tiene que luchar por ella. Doña Consuelo hace buenas migas con Doña Petrova, la madre del empresario ruso, hasta que sus diferencias políticas las llevan a pelearse salvajemente. Cuando la rusa cae inconsciente, Doña Consuelo cree haberla matado. En ese momento, ve a Iván colándose en su jardín.
El Kandinsky ha desaparecido de casa De La Vega y Doña Consuelo tiene grabado al responsable: Iván. Pero cuando revisa las cámaras no solo le descubre a él, sino que también se da cuenta que un miembro de la casa le ha encubierto: Rocío. Ahora, la política de centro derecha está en manos de Doña Consuelo. Y Doña Consuelo no le tiene ningún amor… El romance entre Lucía y Orlando va viento en popa. El primo de Valeria parece que va a entrar con buen pie en la familia. Es un muchacho atento, educado, sincero… Pero ¿quién es esa mujer con la que Pepa le ha visto besarse? Por su parte, Iván y Javi ya tienen la pintura en la academia y un misterioso comprador pakistaní está dispuesto a pagar una pasta por el cuadro. El plan va sobre ruedas, pero no han contaban con algo fundamental que puede mandarlo todo al traste: la estupidez de Raúl.
Iván, Javi y Raúl ponen rumbo al punto de intercambio para vender el cuadro de Kandisnky, sin sospechar que el supuesto pakistaní es en realidad Julieta Laconcha. Acompañada por un grupo de matones, les está esperando con los brazos abiertos para robarles el botín. Tras su ruptura con Orlando, Lucía acompaña a su madre para hacer de traductora de unos inversores chinos interesados en comprar la academia. Pepa se reencuentra con un viejo amigo de su época de actriz y resulta que no es otro que el mismísimo Antonio Resines. Una confusión generada por un dato de la Wikipedia, lleva a Raúl a pensar que Resines podría ser su padre biológico. En casa de Esteban, Rocío intenta hacerse con las fotos en las que sale besándose con Iván, pero tan solo consigue caer en una nueva trampa de Doña Consuelo.
Llega el momento de la verdad: Pepa y su familia deben pagar la mitad de la deuda antes de 24 horas o el banco embargará la academia para regodeo de Doña Consuelo. A la desesperada, Iván prepara un plan para atracar la sucursal de un banco con la ayuda de Javi, Raúl y un antiguo compañero de prisión. Un plan con tantas lagunas que lo normal sería que, además de perder la academia, acaben todos encerrados en la cárcel. Mientras tanto, tras confesarle su verdadera identidad a Esteban, Julieta decide abrir un canal erótico online con la ayuda de Jimmy. Un admirador secreto aprovecha la ocasión para confesarle lo que realmente siente por ella.
La entrega de la academia se retrasa cuando Doña Consuelo sufre un vahído. A su despertar, encuentra dos cosas que no son de su agrado: la primera es que su familia le ha puesto un enfermero cubano que no la va a dejar en paz ni a sol ni a sombra. La segunda es que la porno de Julieta ha vuelto con su hijo. Tendrá que pensar alguna estratagema para que las aguas vuelvan a su cauce… Por su parte, los Carranza ya dan la academia por perdida. Pepa ha hablado con su hermana Carmina y les ha conseguido un localito en el pueblo para que inicien una nueva vida. Cada miembro de la familia se prepara para ello a su manera. Y esto sin tener en cuenta que Raúl ha sido maldecido por una vieja borracha y que Lucía está empeñada en que hay que hacer una limpieza de aura a su hermano antes de que más catástrofes caigan sobre ellos.
Iván intenta sacar partido del atropello de Romualdo, pero chantajear a Esteban no sale como esperaba. Doña Consuelo, tras el incidente en la piscina, toma una decisión drástica y radical: despide a Andrei y en su lugar contrata a un sicario italiano como nuevo jefe de seguridad. El matón ruso aprovecha para confesar algo que lleva mucho tiempo guardándose dentro. En la academia, los Carranza siguen con la soga al cuello sin saber cómo van a pagar la mitad de la deuda, pero reciben una visita inesperada que promete ser la solución a todos sus problemas. Además, Sara revela una noticia que promete enredar aún más a los Carranza y los de La Vega.
La noticia del embarazo de Sara tiene felices e ilusionados tanto a los Carranza como a los De La Vega, a excepción de Doña Consuelo por supuesto, pero la tregua entre ambas familias dura poco. Pepa y los suyos tienen que volver a intentar escabullirse de la policía una vez se revela el secreto detrás de la fortuna de la tita Carmina, que es detenida por Miranda como venganza por haber conseguido que la familia saldase la primera parte de la deuda con el banco. Esteban recibe una visita inesperada y nada agradable: Asun, su exmujer, que alertada por Doña Consuelo ha descubierto que va a ser abuela y está deseando conocer al futuro padre de su nieto.
Tras deshacerse de la droga y conseguir liberar a la tita Carmina, los Carranza reciben un nuevo revés. Tienen que hacer frente a un nuevo pago de la deuda. La tita Carmina tiene una idea: secuestrar a Chiquetete, el gato de Doña Consuelo. Por su parte, Doña Consuelo, harta de la inutilidad de su familia, decide presentarse como candidata a la alcaldía de Madrid, con su propio partido, el DLV. Mientras, Iván recibe la llamada del Curita, un antiguo y violento compañero de la cárcel que le pide que cuide de su hija durante un día. Pese a los esfuerzos de Raúl por evitarlo, Iván acepta el encargo. La niña resulta ser una sexy jovencita de 21 años, que pondrá a los Carranza en peligro.
El último tiroteo en la academia cuenta con el héroe más inesperado posible. La verdadera identidad de Fani sale a la luz y confiesa por qué necesita la ayuda de Iván para dar un gran golpe que podría hacerles ricos a todos. Pepa y Lucía tienen una idea para intentar salvar la academia, aunque supone poner a Sara en una situación delicada que la lleva a confesar una dolorosa verdad. Mientras Doña Consuelo sigue centrada en la campaña electoral a la vez que prepara los preparativos del aniversario de la muerte de Don Emilio, recibe una esperada visita que promete desvelar de una vez por todas cuál es el gran secreto por el que la familia De La Vega tiene tanto interés en la academia de Pepa.
Comienza el enfrentamiento final entre los Carranza y los De La Vega. El gran secreto de la academia sale a la luz y Doña Consuelo sorprende a Esteban con una gran revelación que afecta a toda la familia. Mientras, Pepa y los suyos están desesperados porque no tienen ni idea de cómo van a conseguir salvar la academia, pero Iván ofrece una última oportunidad a toda la familia mientras intenta recuperar el amor de Rocío a la desesperada y ante toda España.