La diosa Sekhmet, mujer con cabeza de león, es una de las figuras más sobrecogedoras del panteón egipcio. Su vínculo con la guerra, la destrucción y las plagas, cuyo reflejo vemos en el texto del Libro de la Vaca Celeste, la convierten en una divinidad peligrosa. Con el paso del tiempo fue adaptando aspectos más amables siendo asimilada a Hathor y a Isis y considerada como diosa de la medicina.