El periodista David Beriain se desplaza hasta el Salvador, este pequeño país centroamericano tiene la desgracia de ser uno de los países más peligrosos del mundo, con unos índices de asesinatos que superan los que se produjeron durante su cruenta guerra civil y los causantes de tanta violencia son las maras o pandillas. La continua guerra entre las maras salvatrucha y 18, y el violento reinado que ejercen estas maras en sus territorios tanto urbanos como rurales están haciendo que muchos salvadoreños se estén organizando para dar caza a los mareros.
El periodista David Beriain se desplaza hasta el Salvador, este pequeño país centroamericano tiene la desgracia de ser uno de los países más peligrosos del mundo, con unos índices de asesinatos que superan los que se produjeron durante su cruenta guerra civil y los causantes de tanta violencia son las maras o pandillas. La continua guerra entre las maras salvatrucha y 18, y el violento reinado que ejercen estas maras en sus territorios tanto urbanos como rurales están haciendo que muchos salvadoreños se estén organizando para dar caza a los mareros.
El Salvador zählt zu den gefährlichsten Ländern der Erde. Vor allem in den Armenvierteln der Hauptstadt San Salvador stehen brutale Gewaltverbrechen auf der Tagesordnung. 6.500 Morde hat der kleinste Staat Zentralamerikas pro Jahr zu beklagen – viele davon gehen auf das Konto skrupelloser Straßengangs, wie der berüchtigten „Mara Salvatrucha“ . Aber auch rivalisierende Banden, darunter die „18“ , terrorisieren die Bevölkerung mit unvorstellbaren Gräueltaten. Denn oft werden ihre Opfer gefoltert, zerstückelt und verscharrt. Um mehr über den blutigen Konflikt zu erfahren, begleitet Reporter David Beriain eine schwer bewaffnete Spezialeinheit der Polizei bei der Jagd nach den Bandenmitgliedern.
