Un coche que conduce en sentido contrario produce un accidente. Hay dos coches implicados con una pareja de ancianos en uno de los turismos y dos amigos que vuelven a casa tras una noche de juerga en el otro. La anciana y uno de los chavales mueren y los dos supervivientes no pueden contar qué ha sucedido ya que Carlos, el chico joven, sufre una amnesia post-traumática y el anciano está inconsciente. Carlos está hundido porque todo parece indicar que era él quien conducía en sentido contrario. Su padre, que es abogado, está dispuesto a hacer todo lo posible para que su hijo no pague por lo sucedido.
Por otro lado, Héctor tiene que examinarse del carné de conducir. Le acompaña al examen Merche, que ya se ha examinado varias veces y que además está muy nerviosa porque de camino a la prueba se ha cruzado con el kamikaze. El examinador que les toca es el que más fama tiene de suspender y Merche confunde la derecha con la izquierda.
Además, Cruz está a punto de dejar el hospital y se niega a realizar más operaciones, pero uno de los cirujanos queda atrapado en un atasco de tráfico y tendrá que enfrentarse a un nuevo caso profesional.