La era del petróleo llega a su fin. Cada vez extraemos menos y se imponen las energías limpias, pero la transición energética plantea nuevos retos. Materiales críticos que escasean. Costes medioambientales en la producción. O tensiones geopolíticas por su extracción. ¿Estamos preparados para lo que viene? La especulación financiera saca provecho de la escasez. Las mismas tácticas que manipulan el precio del petróleo o los alimentos amenazan ahora a los minerales críticos, esenciales frente a la emergencia climática. También al agua, que ya cotiza en bolsa. ¿Podemos dejar nuestra supervivencia en manos de los mercados? Las alternativas al petróleo son inciertas y las energías renovables no cubren toda la demanda actual. ¿Debemos cambiar nuestro modelo de consumo?