En los tiempos en que el hambre azota al país por el aislamiento, el fútbol empieza a ser el entretenimiento para las masas. La dictadura promueve un partido de fútbol entre la selección española y su vecina portuguesa, que sirve además para reforzar los lazos con uno de los aliados de Franco durante la Guerra Civil. Del mismo modo, las revistas de variedades y estrenos cinematográficos, como “Primer Plano”, crean una nueva pléyade de estrellas, jóvenes actores y actrices que divierten al pueblo con sus comedias.