Australien ist das Land der Sonne, des Meeres und der Wellenreiter. 36.700 Kilometer Küste - von den Tropen im Norden bis zu den eisigen Gewässern im Süden - umrahmen den fünften Kontinent.
The third instalment features the wildlife of Australasia's seas and coasts. On Western Australia's desert coastline, seas are lifeless apart from a few fertile pockets. Whale sharks feed close to shore at Ningaloo Reef. At Shark Bay, sharks and dogtooth tuna pin a sardine shoal to the shore, filmed from the air and underwater. A pair of Bryde's whales joins the feeding frenzy. Shallow, sandy bays are ideal conditions for seagrass, browsed by dugongs. In north Australia, monsoon rains flush rich sediment into the ocean. At low tide, golden ghost crabs and mudskippers emerge to feed on the exposed worms, snails and shellfish. The Leeuwin Current brings warm water to the south coast. Australian sea lions and southern right whales raise their young in the impoverished waters of the Great Australian Bight, while giant cuttlefish gather in the breeding season. The cold Southern Ocean skirts Australia's remote south west tip, where the seas are home to giant kelp forests and strange creatures. The leafy sea dragon is camouflaged as seaweed, while the handfish uses its fins to walk across the seabed. At night, female lobsters climb to high points on the reef to release their brood of larvae. In New Zealand's cold and nutrient-rich waters, gannets are filmed plunge-diving into a sardine shoal, which also attracts common dolphins. Hector's dolphins stay close to shore to avoid sharks. Snares Islands penguins must negotiate a steep granite rockface and patrolling Hooker's sealions to reach their nest burrows.
La tercera entrega muestra la flora y fauna de los mares y costas de Australasia. En la costa del desierto de Australia Occidental, los mares no tienen vida aparte de unas pocas bolsas fértiles. Los tiburones ballena se alimentan cerca de la costa en el arrecife Ningaloo. En Bahía Shark, el tiburón y el atún diente de perro empujan un cardumen de sardinas hacia la costa, filmado desde el aire y desde el agua. Un par de ballenas de Bryde se unen al frenesí. Poco profundas, las playas de arena son las condiciones ideales para los pastos marinos, visitadas por los dugongos. En el norte de Australia, las lluvias monzónicas lavan los ricos sedimentos del océano. Con la marea baja, los cangrejos dorados fantasma y los saltarines del fango emergen para alimentarse de los gusanos expuestos, caracoles y crustáceos. La Corriente Leeuwin trae agua cálida de la costa sur. Los leones marinos de Australia y las ballenas francas australes crian a sus hijos en las aguas pobres de la Gran Bahía Australiana, mientras sepias gigantes se reúnen en la época de reproducción. El frio océano Antártico bordea la remota punta suroeste de Australia, donde los mares son el hogar de los bosques de algas gigantes y de criaturas extrañas. El dragón marino de hoja verde se camufla como algas, mientras que el pez de extremidades usa sus aletas para caminar por el fondo del mar. Por la noche, las langostas hembra suben a las partes altas del arrecife para expulsar su camada de larvas. En las aguas frías y ricas en nutrientes de Nueva Zelanda, los alcatraces son filmados buceando en un banco de sardinas, que también atrae a los delfines comunes. Los delfines de Héctor se mantienen cerca de la costa para evitar a los tiburones. Los pingüinos de las Islas Snares deben sortear una escarpada pared de granito y vigilar a los leones marinos de Hooker para alcanzar sus nidos.
