El día que arranca esta historia la vida de Yamilet (Sabrina Seara) cambiará por completo. Conocerá a un hombre maravilloso, serio, responsable, y a un sinvergüenza. El problema es que no sabrá cuál es cuál y corre el riesgo de elegir al segundo. Bueno… en rigor, ese es sólo uno de los problemas que tendrá que enfrentar la pobre Yamilet para lograr ser feliz.
Yamilet comienza a poner en duda si realmente estuvo bien en haberle dicho a Ignacio que estaba enamorada de José Alberto, sabe que no podrá soportar ver a Ignacio con otra mujer.
Ignacio besa a Nieves delante de Yamilet en el cuartel de bomberos. Cuando Nieves le plantea a Nacho por qué la beso, él le pide disculpas y que se olvide del beso.
Chuo enfrenta a Marbelis en la iglesia y le pide que le diga la verdad sobre su hijo y que en la casa del señor no puede decir mentiras. Marbelis se incomoda y le pregunta quien se lo dijo.
Marbelis se siente amenazada por Mercedes, que se encuentra que se encuentra en una crisis de nervios a punto de contar que el envenenamiento de Ignacio fue por culpa de su propia hermana.
Yamilet le confiesa a Nacho en su lecho de muerte que lo ama y que lo de Gamboa es mentira. Yamilet está contenta porqué Nacho empezó a responder al tratamiento desde que la vio.
Ignacio explota de emoción al ver a Yamilet, luego de haber estado al borde de la muerte. Ella le confiesa que no lo ama, que se lo había dicho, pensando que el se iba a morir
Ignacio increpa a Mayerlin para que le diga porque el es el amor imposible de Yamilet. Mayerlin le indica que averigüe en su familia para obtener una respuesta.
Marbelis es capaz de todo por ocultar su secreto y que nadie nunca la desenmascare, es así que ha decidido matar a Luz, la bruja que tira las cartas y adivina el presente y el futuro de las personas.