Por primera vez en su historia desde la creación de la Unión Europea, la ultraderecha puede alcanzar el poder y condicionar de forma directa las políticas comunitarias. Ha sido un ascenso imparable y progresivo, primero en sus respectivos países de origen, gobernando en solitario o en coalición con otras fuerzas conservadoras. Y ahora se preparan para unir fuerzas y tomar el control del Parlamento y, por tanto, de la Comisión Europea. Hasta llegar a este punto álgido, estos partidos han debido sortear los cordones sanitarios a base de matices a sus postulados ultras que han generado grietas y tensiones entre los miembros de esta familia política al alza. Con Irene Castro, corresponsal de elDiario.es en Bruselas, hablamos de las tácticas y la aritmética que puede hacer posible la influencia de la ultraderecha en la Unión Europea. Con Alberto Pozas repasamos la figura de Alvise Pérez, un agitador ultra, escindido del partido que le acogió, Vox, y que puede lograr representación en el Par