Un conflicto diplomático altera la normalidad del reino. Dos esclavos cristianos, propiedad de Abu Bark, han escapado y se han escondido en Toledo. Alfonso X y Rodrigo insisten en que esos esclavos deben ser capturados y devueltos a su legítimo dueño, por mucho que les duela entregar a dos cristianos a un destino cruel. Miranda y Oliva opinan que deben defender a todo cristiano en apuros, pero la paz está en juego, por mucho que mantenerla sea duro. Todo se complicará cuando esos dos esclavos, desesperados y hambrientos, ataquen a una tendera.