Gracias a su nueva defensa, un juez decreta la libertad del excoronel al considerar que no constituye un peligro para la sociedad.La defensa de Barragán ha conseguido lo imposible: que el excoronel pueda salir de la cárcel y con su nombre en limpio. Sin embargo, esto toma por sorpresa a todas las personas afectadas por sus crímenes, incluso a su propia esposa. Ya en libertad, Barragán se entera que María Luisa está perdida y que, además, se encuentra con un joven, lo que hace que tome medidas desesperadas para dar con su paradero.