11 de marzo de 2004. Madrid despierta con el mayor atentado de la historia de Europa: a tres días de las elecciones generales, diez bombas estallan en cuatro trenes de la red de cercanías.
La carrera por la Moncloa se convierte en una encarnizada batalla política en la que la autoría del atentado toma el protagonismo
Los terroristas del 11M están libres y tienen más explosivos. Hay indicios de que pretenden morir matando. La carrera contrarreloj para detenerlos es la prioridad de las fuerzas policiales.
El macrojuicio por el 11M tiene en vilo a toda España. No todos los responsables se sientan en el banquillo de los acusados, unos porque se inmolaron y otros porque se ignora su identidad.