Un agente de la policía secreta visita la imprenta de Antonio, preguntando a sus jefes sobre su situación económica. Alcántara ya no se cree que sus problemas con la justicia vayan a quedar en agua de borrajas y de nuevo va a ver a Don Pablo, en busca de algo más que buenas palabras. Mercedes, ajena a los problemas de su marido, tiene programada una visita al Museo del Prado con José Miguel, su profesor de las clases de la parroquia. Antonio se enfada con Merche, y es que ya empieza a estar harto de tanta clase y tanta cultura... Francesc, el hippie de Ibiza que apareció en el capítulo anterior, tienta a Inés con irse a vivir a una comuna de un pueblo abandonado de Segovia. Eugenio, muerto de celos, se muestra esquivo con Inés. Por su parte, Tony no sabe ya que inventar para aplacar la sospechas de Mila que, cansada de sus mentiras, le pide explicaciones. Pero a pesar de todo, Tony sigue viéndose con Marta... Paquita hace planes de futuro con Quique, pero éste sólo piensa en demostrarle su cariño a todas horas... Carlitos, entusiasmado con la pintura de Dalí y de Picasso, presenta en una exposición del colegio un retrato de Mayka que dará mucho que hablar.