Las gradas de San Mamés se han acostumbrado a las carreras y goles del delantero Iñaki Williams. Décadas atrás, hubiera resultado casi impensable que un futbolista negro vistiera la camiseta de un club tan aferrado a la tradición como el Athletic. Pero Williams, nacido en Bilbao, es el primer jugador de origen africano asentado en la plantilla. Un símbolo del cambio de los tiempos que se ha ganado el cariño de la afición. Cuando despertó del coma lo primero que escuchó fue que su cerebro se había desconectado de la parte derecha de su cuerpo y que sería muy difícil que volviera a montar en bici. Siete meses después del accidente Adriano Malori viaja a Canadá a disputar lo más parecido a su primera carrera.