Loli y Claudia pasan mucho tiempo juntas en el gimnasio. Es allí donde Loli se fija en la estupenda figura que luce su sofisticada vecina y decide ponerse el mismo trasero que ella. Todo se complica cuando Loli se empeña en que sea Ernesto quien la opere, que es el que mejor conoce el culo de su mujer. Ernesto, horrorizado ante la idea, trata de mostrar a Loli, con mucha sutileza, los aspectos más desagradables de esta operación quirúrgica. Incluso Mariano está en contra de que cambien el cuerpo de su mujer, al que tan acostumbrado está ya. Sin embargo, ella sigue convencida de querer pasar por el quirófano. El profesor de Literatura les encarga a Laura y a sus compañeros que preparen la obra de teatro que anualmente se representa ante los padres de alumnos. Esta vez, Laura quiere poner en escena algo que se aleje de los textos clásicos de todos los años, pero el profesor no es partidario de la idea. Al final los chicos comienzan a ensayar ¿El perro del hortelano¿ hasta que Rafa se niega a seguir recitando textos en verso y abandona los ensayos. Es entonces cuando Laura se decide a representar un texto rompedor sin decírselo al profesor. Una oscura noche de tormenta, Sheila y Pepe observan a Teresa, la Condesa, paseando por la casa con un aspecto realmente terrorífico. Los niños dejan volar su imaginación y tras comentar la horrorosa visión con sus vecinos Sergio y Bea, Mariano les descubre rebuscando entre las cosas de la asistenta. Su padre les regaña por haber entrado en la habitación de Teresa pero también se inquieta cuando descubre que los Condes de Groizard, para los que la Condesa trabajaba, murieron en un incendio. El miedo y la sospecha se adueña de la mayoría de los Sánchez.