¿Qué ocurrió después de ese reencuentro en la calle, tras aquella noche de insomnio? Descubrimos la reconciliación de Luisita y Amelia… y el después. Un después lleno de amor, redescubrimiento y, cómo no, alguna que otra discusión. Luisita y Amelia se esfuerzan en aceptar lo que no les gusta de la otra, seguir sorprendiéndose y alimentar el erotismo y el deseo para evitar acomodarse. No siempre salen las cosas como esperan, pero ¿qué es el amor real sino quererse con sus imperfecciones?
María sufre una crisis existencial relacionada con su actividad profesional y los sueños que un día tuvo sobre su futuro y que no se cumplen. Querría ser escritora, una vida aventurera, vivir en Londres, en Nueva York… Se siente estancada, sin apenas estímulos, pese a la disposición de Nacho, que sufre indirectamente esta crisis sin acabar de entender qué está ocurriendo.
Nos colamos dentro del rodaje de la segunda temporada de #Luimelia para ver cómo la han vivido sus protagonistas. ¿Qué pasó con el cuadro de los gatos? ¿Cómo vivieron Carol y Paula las escenas más destacadas de la temporada? ¿Cómo fue rodar los múltiples cameos de cada capítulo? En el making lo tienes todo...
Luisita y Amelia han descubierto algo más adictivo que 'Amar eternamente': espiar a dos vecinas mayores, Dolores y Gabriela, para intentar adivinar la naturaleza de su relación. Amelia está convencida de que mantienen una relación sentimental a escondidas mientras que Luisita cree que su novia está obsesionada. ¿Es su historia un drama de amor prohibido o se trata de dos mujeres que simplemente viven juntas? Las protagonistas recuerdan que, durante generaciones, los homosexuales han tenido que ocultar sus verdaderos sentimientos.
Mientras Ignacio queda con Marina, una novia de la adolescencia, la aparición de una ex de Amelia provocará un pequeño tsunami en su relación con Luisita. Las tribulaciones de Amelia y Luisita darán lugar a varias reflexiones mientras que Borja y Diana, los guionistas que están escribiendo el capítulo, deliberarán sobre la sinceridad, la autocensura, la presión de los fans y algo tan romántico como si estamos predestinados, o no, a encontrarnos con el amor de nuestra vida.
Tras una noche de fiesta, Amelia y Luisita despiertan con una resaca de campeonato y el recuerdo de una noche de pasión a tres bandas: ¡se han acostado con Maru! Con recuerdos contradictorios sobre lo sucedido, comienzan las acusaciones mutuas de haber instigado la situación. ¿Quién se lanzó a besar a Maru? ¿Quién es la culpable del trío? Más allá del desconcierto, lo importante es la cuestión de fondo que preocupa a Luisita y Amelia: ¿han tirado el romanticismo por la borda al meter a una tercera persona entre las sábanas? o, por el contrario, ¿esto es algo que refuerza su confianza y pasión?
Amelia está de gira y Luisita aburrida, confinada y escayolada. ¿Y qué hace para pasar el tiempo? Hacer videollamadas y espiar a las vecinas. Ahora la obsesionada es ella, que está convencida de que entre Dolores y Gabriela hay algo más que una amistad y piensa demostrárselo a Amelia. Pero una escena, aparentemente, de terror hace saltar las alarmas: ¿un asesinato? Luisita alerta a Amelia para que le ayude a resolver lo que está pasando con sus misteriosas vecinas de enfrente.
Luisita y Amelia preparan un día de campo para celebrar la noche de San Juan con Dolores, Gabriela, Maru y María, recién llegada de Londres. Al plan se suman Nacho y Marina en el último momento. Entre reencuentros, conjuros y un bizcocho especial, se pone sobre la mesa el tema del matrimonio, conversación que Luisita y Amelia estaban tratando de evitar por miedo a afrontar sus discrepancias. Sin embargo, puede que las experiencias de estos últimos meses hayan conseguido acercar sus posturas mucho más de lo que piensan…
Luisita y Amelia se acaban de comprar un piso, pero eso no significa que la conversación sobre el matrimonio haya quedado aparcada. Esta vez parecen tenerlo todo bajo control, pero un obstáculo llamado José Antonio está a punto de dinamitar sus planes de vida. Llega el momento de improvisar y para eso cuentan con la ayuda de sus amigos Sergi y Ana. Por su parte, María se ha instalado en casa de sus padres, mientras Nacho y Marina han seguido adelante con su relación, planteándose algo más que un futuro juntos.
Amelia y Luisita han encontrado un trabajo con el que seguir adelante. En el call center, la Gómez conoce a LAIA, que acaba de dejar a su chica y no pasa por buen momento. Entre ellas se inicia una buena amistad. En el plató, Amelia conoce a ALBA, la ex de Laia y también intenta animarla. Ambas parejas parecen ser los dos extremos de una misma relación, Luisita y Amelia siguen reafirmando su amor pero, ¿es suficiente en sus circunstancias? porque José Antonio sigue sin intención de marcharse de su casa y los planes de boda no parecen avanzar. Mientras, el predictor indica nuevamente a Marina que no está embarazada y decide ir al ginecólogo.