Comenzó siendo la tabarra de unos melenudos; la casa común, nuestro planeta, vive bajo amenaza. Muchos equilibrios fundamentales se están rompiendo, nos decían, y los mirábamos con desdén. Su lucha, perseverante, avalada por sucesivos informes científicos de autoridad aplastante, ha logrado penetrar en la conciencia universal. Quedó atrás el tiempo de la sensibilización, ahora ya todos sabemos lo suficiente.