Leandro recibe una preocupante llamada de Clementina; él alcanza a llegar para cumplir su promesa de amanecer con Clementina, quien muere en sus brazos. Leandro se sume en una profunda tristeza que lo deja sin poder cantar ni componer. Al enterarse de la ceguera de su hermano Arturo, Leandro decide ir en su auxilio. Pepe se hace a un lado para que Erótida pueda estar con Mauricio.