Despechada al conocer que el atractivo actor no desea saber nada de ella, Raquel comunica a los vecinos que no les arreglará los desperfectos. Sin embargo, la gran insistencia de los propietarios afectados y de su hermano Joaquín hace que Sergio, a su pesar, vuelva a conquistar a la directora comercial.
Durante la celebración de una junta de vecinos, los Recio obligan a Enrique y Araceli a desmontar las antiestéticas rejas que habían instalado en su terraza. Poco después, Araceli colisiona accidentalmente su coche con el de Antonio Recio. Para evitar que sus vecinos crean que se trata de una venganza, el matrimonio Pastor-Madariaga roba las llaves del automóvil de sus vecinos y se las entrega a Maxi para que un amigo suyo que trabaja en un taller lo arregle por la noche.
Desconociendo que Javi es un hombre casado, Cris intenta ligar con el joven presidente de la comunidad en un intento de rehacer su desastrosa vida sentimental. Además, la joven intenta recuperar sus muebles, que aun se encuentran en la casa de Goya. La nueva propietaria del piso se niega a entregárselos tras afirmar que Cris le vendió la vivienda con el mobiliario incluido.
En plena guerra con Lola por convertirse en la mujer más importante de su hijo, Goya se empeña en hacerles la colada consciente de que a Javi le gusta lo suave que ella deja la ropa. Cuando su nuera le pregunta por la marca del suavizante que utiliza, Goya se niega decírselo.
Por otra parte, la nueva vida de Izaskun y Mari Tere como okupas parece peligrar, ya que varias personas han mostrado interés en adquirir el piso piloto de la finca. Ambas mujeres tendrán que emplearse a fondo para disuadir a los posibles compradores.
Por otro lado Maria Moreno entra en acción como domadora de perros
Despechada al conocer que el atractivo actor no desea saber nada de ella, Raquel comunica a los vecinos que no les arreglará los desperfectos. Sin embargo, la gran insistencia de los propietarios afectados y de su hermano Joaquín hace que Sergio, a su pesar, vuelva a conquistar a la directora comercial.
Durante la celebración de una junta de vecinos, los Recio obligan a Enrique y Araceli a desmontar las antiestéticas rejas que habían instalado en su terraza. Poco después, Araceli colisiona accidentalmente su coche con el de Antonio Recio. Para evitar que sus vecinos crean que se trata de una venganza, el matrimonio Pastor-Madariaga roba las llaves del automóvil de sus vecinos y se las entrega a Maxi para que un amigo suyo que trabaja en un taller lo arregle por la noche.
Desconociendo que Javi es un hombre casado, Cris intenta ligar con el joven presidente de la comunidad en un intento de rehacer su desastrosa vida sentimental. Además, la joven intenta recuperar sus muebles, que aun se encuentran en la casa de Goya. La nueva propietaria del piso se niega a entregárselos tras afirmar que Cris le vendió la vivienda con el mobiliario incluido.
En plena guerra con Lola por convertirse en la mujer más importante de su hijo, Goya se empeña en hacerles la colada consciente de que a Javi le gusta lo suave que ella deja la ropa. Cuando su nuera le pregunta por la marca del suavizante que utiliza, Goya se niega decírselo.
Por otra parte, la nueva vida de Izaskun y Mari Tere como okupas parece peligrar, ya que varias personas han mostrado interés en adquirir el piso piloto de la finca. Ambas mujeres tendrán que emplearse a fondo para disuadir a los posibles compradores.
Por otro lado Maria Moreno entra en acción como domadora de perros