Viaggiamo alla scoperta delle tracce invisibili che si celano nella splendida città di Trieste.
Trieste alcanza una gran importancia en el siglo XVIII al convertirse en el puerto del imperio Austrohúngaro. La antigua y aislada Trieste se transformó en una bulliciosa ciudad coincidiendo con la decadencia de Venecia. Su situación en una frontera sujeta a continuos cambios transformó a Trieste en un crisol de idiomas, ideas y tradiciones. Sus raíces italianas y austriacas forjaron su espíritu emprendedor, clásico y elegante.