Frank Cuesta se adentra en las cuevas de Tailandia, donde descubre a los mamíferos más asombrosos y que resultan más desconocidos para el ser humano: los murciélagos.
En una de las grutas de Tailandia, Frank de la Jungla mantiene en sus manos a la especie de tamaño más pequeño del mundo, muestra los ejemplares más grandes del planeta -llamados murciélagos zorros- y descubre a los telespectadores el “falso vampiro de la herradura”, cuya principal característica reside en sus rasgos humanoides. Además, se enfrenta a serpientes, insectos de imposible anatomía o peces sin ojos que sólo han vivido en la oscuridad.