Jalis de la Serna se hace unas pruebas y confirma lo que la mayoría de la población no sabemos o no queremos saber, es decir, que somos adictos al azúcar. Y no tanto porque consumamos cucharadas de azúcar a raudales, como que estamos ingiriendo azúcares añadidos ignorándolo. Con esta premisa el periodistase plantea, bajo la supervisión de un médico, pasar un mes sin tomar azúcar. La mejor manera de cumplir su compromiso es viajar al único país del mundo que ha logrado reducir el consumo de azúcar. Ese país es Chile y ¿cómo lo ha hecho? Por ley. De la Serna va descubriendo a lo largo de su viaje en qué consiste. Comprueba que algo tan básico como unos sellos, que se ven a simple vista, cada vez que quieres comprar algo en el super, está cambiando la cultura alimentaria del país. Esa decisión política no ha estado exenta de obstáculos. La industria alimentaria se ha visto obligada a reformular sus productos y reducir considerablemente los niveles de azúcar. La entrevista con el artífice de esta iniciativa, Guido Guirardi, un médico y senador chileno, pone en evidencia que el sistema sanitario de ningún país se puede permitir los costes que está suponiendo el exceso de azúcar en la población.