Todo el mundo tiene una película de apagar el móvil. Es decir, encerrar al resto de la humanidad en un calabozo y tumbarse a disfrutar como un gorrino. La mía, o una de las mias, es "La hija de Ryan", una película que amargó al vida a su director y que tiene una historia detrás digna de contarse. ¿La quieres conocer? Te lo contamos en el episodio de hoy de "El podcast de Jot Down"