Valentina tiene un club de amigas con quienes se habla por teléfono todo el día, se visten igual y se cuelgan los mismos dijes al cuello para indicar que son las mejores amigas del mundo. Han prometido no separarse nunca. El papá de Mariana consigue un trabajo en Querétaro y decide probar suerte durante un año. Valentina y sus amigas tendrán que aprender que la amistad va más allá que nada más estar juntas.