Ángeles Caballero creció en una familia normal: ni rica ni pobre, ni ordinaria ni extraordinaria, ni idílica ni desastrosa. Una familia como la mayoría de las familias que dio como resultado a una de las periodistas que mejor cuentan la vida real. Vamos a ir a Getafe, una ciudad del sur de Madrid de 180.000 habitantes, a ver si ser de allí tiene algo que ver con que haya en ella tantas cosas extraordinarias en una infancia tan como las demás.