Las tres religiones mayoritarias en nuestro país convivieron con relativa paz, durante muchos años. Judíos, cristianos y musulmanes fueron vecinos en muchas ciudades de España. No solo la más reconocida, la ciudad de Toledo, se convirtió en punto de encuentro y convivencia de las tres culturas dominantes en gran parte de la edad media. A lo largo y ancho de la España medieval, construían sus edificios, vendían sus productos y convivían unos con otros sin mayor problema. Este hecho convirtió a España en una de las naciones más avanzadas gracias a la influencia de los distintos sabios, ingenieros, matemáticos… de cada cultura. La arquitectura típica de cada comunidad se vio reflejada en las ciudades, en sus plazas, iglesias, sinagogas, mezquitas, algunas desaparecidas y que nosotros, junto con otros aspectos destacables de la época, reconstruiremos con una mirada positiva de lo que fue uno de los momentos de mayor entendimiento social de la historia de la humanidad.