El Faraón Niño es uno de los soberanos más carismáticos del mundo faraónico. Queremos saber todo de él y, como se ha comprobado en las últimas décadas, si no lo sabemos, nos lo inventamos. Desde que se hicieron las radiografías de la momia en 1968 hasta el escáner de 2005, las teorías para saber la causa de su muerte son variadas y, en ocasiones, surrealistas.