Amenofis IV, Akhenatón, es uno de los faraones más populares de la historia de Egipto. Su celebridad nace no solamente de ser el padre de Tutankhamón sino porque se le ha hecho protagonista de acciones, pensamientos y anhelos que, siendo acordes con la realidad histórica, no sé sustentan en nada. Akhenatón no fue pacifista, ni monoteísta, ni profeta, ni tantas cosas que se le han achacado. ¿Dónde nacen todos esos mitos modernos?