1986. Nápoles. Coppola debe conseguir una Ferrari negra para Maradona y lidiar con su vida privada.
1990. Coppola se obsesiona con conquistar a una modelo alemana, pero ella no tiene el menor interés.
1994. Coppola apela a soluciones extremas para acallar rumores sobre la vida privada de Maradona.
1996. Detenido, Coppola vive los días más oscuros de su vida con solo dos armas: cera y lavandina.
2000/1985. Coppola reflexiona sobre su carrera mientras viaja con Maradona a Cuba para rehabilitarse.
2001. Coppola vuelve a Buenos Aires para organizar el partido de despedida de Maradona.