Tras recibir personalmente la desagradable noticia de su despido, Belén intenta infructuosamente contactarse con Dantón para recibir su apoyo y su palabra de que todo va a estar bien recibiendo a cambio la sorpresa de la presencia de Simón quien se ofrece a ayudarla al verla atareada con su hija y con una sombra de tristeza en su rostro. A su casual encuentro con Yúrica Carlos es testigo de la problemática de su vecina y amiga al esta decidirse a confesarle la mala experiencia por la que atraviesa tras ser asumida como la amante de su jefe y verse en la tarea de estarse escondiendo de la esposa del mismo.