os vecinos de Esperanza Sur están de enhorabuena porque acaban de instalarles un parque infantil en el barrio. Todos están encantados menos Mauricio, que odia todo lo que tenga que ver con niños, y decide destruir el parque. Una atractiva mamá inicia una colecta para reparar los desperfectos, lo que provoca que el hostelero se haga pasar por Oswaldo y decida contribuir a la causa para intentar ligar con ella. Por otro lado, a los García se les ha estropeado su vieja televisión y Chema piensa en primer lugar en comprar una nueva, porque desconoce absolutamente cómo llevar a cabo este tipo de reparaciones. Antes era Fidel quien hacía estas chapuzas en casa y ahora es Soraya. Harto de que se metan con él, decide pedirle ayuda a Junca para aprender. Por último, han contratado a Aidalai para limpiar la comisaría. Todo transcurre sin problemas hasta que llega la hora de poner fin a la jornada laboral. Luisma se confunde de mochila y se lleva la de un policía. Su primera intención cuando descubre el error es devolver la mochila enseguida, pero Barajas le anima a ponerse el uniforme y hacerse pasar por agente.
Los vecinos de Esperanza Sur están de enhorabuena porque acaban de instalarles un parque infantil en el barrio. Todos están encantados menos Mauricio, que odia todo lo que tenga que ver con niños, y decide destruir el parque.
Una atractiva mamá inicia una colecta para reparar los desperfectos, lo que provoca que el hostelero se haga pasar por Oswaldo y decida contribuir a la causa para intentar ligar con ella. Por otro lado, a los García se les ha estropeado su vieja televisión y Chema piensa en primer lugar en comprar una nueva, porque desconoce absolutamente cómo llevar a cabo este tipo de reparaciones.
Antes era Fidel quien hacía estas chapuzas en casa y ahora es Soraya. Harto de que se metan con él, decide pedirle ayuda a Junca para aprender. Por último, han contratado a Aidalai para limpiar la comisaría. Todo transcurre sin problemas hasta que llega la hora de poner fin a la jornada laboral. Luisma se confunde de mochila y se lleva la de un policía. Su primera intención cuando descubre el error es devolver la mochila enseguida, pero Barajas le anima a ponerse el uniforme y hacerse pasar por agente.