Ángel le cuenta a Inmaculada que las huellas de los pies no coincidieron, por lo tanto Neta no es su hija. Esa noticia a Ivana la hace muy feliz mientras que a Inma le cae muy mal y se desmaya, Alejandro la sostiene y la lleva a la habitación. Se queda un rato con ella hasta que se tranquiliza y se quiere ir, pero Inmaculada no quiere que la deje sola y es ahí cuando Alejandro le confiesa que quiere volver a recuperar a su familia y a Abril y se va. Eso a la Baronesa le da una crisis de locura y nervios que empieza a tener sueños malvados.