Domingo fue hasta Patronato para contarle a Pamela que había decidido irse de su casa. Sin embargo, ella no está convencida de regresar con él porque aún tiene demasiados compromisos con su familia y con su ex esposa. Un golpe duro para Aldunate, quien además tuvo que dejar la conversación por la mitad porque Pepa desesperada lo llamó, ya que Santi había desaparecido. Al llegar a casa, Domingo empacó sus cosas y tuvo una emotiva despedida con la madre de sus hijos quien, en medio de las lágrimas, le pidió que no se fuera de la casa.