María Elsa se llevó un tremendo susto cuando despertó, debido a que cuando saludó a Horacio, se dio cuenta que estaba sangrande de su nariz. Por lo mismo, Gerardo llegó hasta el lugar para atenderlo y saber qué le pasaba. Estela fue hasta la casa de Ángela para encarar a Armando, ya que vio su camioneta afuera del lugar. Cuando ingresó comenzó a decirle en presencia de la madre de Augusta, que él había regalado a su nieta a una familia en Valparaíso.