El joven actor Nazareno Casero decide dar a conocer que no es hijo biológico de quien todos conocen como su padre, Alfredo Casero, sino fruto de una de las donaciones de esperma de Bruno. Mientras tanto, continúan las sorpresas para Violeta, quien recientemente se enteró de su embarazo, y descubre el secreto que ocultan Bruno y Caro.