Marcos tiene 54 años, es informático y llega desde Barcelona con su cola de sirena buscando un chico más joven que él para comenzar una relación y que, además, sea buena persona. Su cita será Javier, un veterinario de 48 años que viene desde Cantabria dispuesto a tener una pareja durante una temporada ya que considera que el amor se agota y no cree en la monogamia.