Debido al conjuro del olvido, el mundo cambia: Mía se convierte en una chica nerd y tímida; los Tiburones ahora son skaters; Matilda y Úrsula viven en casa de Mecha, que es la líder rebelde de las Leonas Azules; Úrsula es la directora de Escolarium; Francisco es un portero y es triste porque no tiene hijos; Diego ya no está con Matilda y no sabe que es un Kanay. Grachi quiere revertir el conjuro porque lo hizo sin pensar, pero Ivis le dice que no puede, ya que ella nunca ha existido. Viendo las cosas que pasan en el mundo alternativo, Grachi empieza a sentirse mal porque el mundo alternativo está feliz sin ella.